Cada vez que hago una preboda, me gusta variar la localización y tengo que decir que cada vez me quedo más sorprendido de todos los rincones que tiene la provincia de Jaén, y en esta ocasión conocer Torres me encató.
El día que comentamos hacer la preboda en Jaén, no sabiamos muy bien donde hacerla así que finalmente nos decidimos en unir Jaén y su pueblo natal para la sesión, y creo que no pudimos elegir mejor. Una gran preboda para una gran pareja.